Sobre la necesidad de la unidad de los sectores revolucionarios.

Por: Ing. Rolando Reyes Tío
MSC. NLH Master of Science
Norway University

Cap VI

Por otra parte, Ho Chi Ming a travez de una alianza de nacionalistas y comunistas había derrotado a los franceses en la batalla de Dienbienphu y proclamando la republica democrática de Vietnam. Fiel a la constitución hizo un llamado por la reunificación del país y continuaba la guerra contra el gobierno militar apoyando por USA.
Ese mismo año, 1963, en republica dominicana, se hacia añicos la constitución con un artero golpe militar y se dividía el país.
El movimiento revolucionario 14 de junio fue declarado ilegal por el nuevo gobierno golpista del triunvirato, sus locales allanados saqueados, comenzando nuevamente la persecución política contra los catorcistas.
Manolo Tavares Justo había sobrevivido la represión trujillista al ser liberado de la cárcel después de la caída de la dictadura. Reorganizó el 14 de junio para luego protagonizar el segundo intento de unidad revolucionaria en la historia reciente del país. Consideró que dado el golpe de estado de 1963 había llegado el momento de unir los revolucionarios para restablecer la constitucionalidad y evitar una nueva dictadura.
Comenzó los aprestos para una lucha político- militar que incluía guerra de guerrillas y ordenó la escogencia de los mejores hombres dentro del movimiento. Enrriquito Almanzar, Arnulfo Reyes, Sostenes Peña Jaquez, Zoilo Batista otros patriotas fueron incorporados en la lucha. Se formaron 6 frentes guerrilleros rurales y uno de resistencia urbano.

Pero una amplia unión revolucionaria no fue posible. El PSP y el PNR se opusieron a la insurrección. El PRD y Bosch fueron engañados por parlamentarios gringos que aseguraban un pronto retorno a la constitucionalidad con ayuda del gobierno norteamericano y la presión internacional.

Manolo y gran parte de sus hombres fueron asesinados en las montañas en su intento por restablecer el estado de derecho y la constitución al país.

Dos años mas tarde, el pueblo dominicano se lanzaban en masa a las calles, fusil en mano, tal como lo había hecho Manolo y sus hombres, clamando por la libertad y la constitucionalidad.

“ Continua”.