Ve macabra actitud ante haitianos

Por Miguel Ponce

Santiago. La Iglesia católica calificó de infeliz y macabra la idea de la organización de vecinos de la zona sur de Santiago, de amenazar con sacar a los ilegales haitianos de sus comunidades.
Llamó por esto a las autoridades a asumir su rol para detener lo que consideran una “locura xenofóbica”.“Con bombos y platillos informan al país la creación de una brigada compuesta por cien hombres para mantener limpios de haitianos a los barrios de la localidad. ¿De dónde ha salido tanto odio y xenofobia? ¿Quiénes están detrás de estas acciones reñidas con la ley?”, se preguntó la Iglesia mediante el editorial del semanario católico Camino.Dijo estar consciente de que después del terremoto del 12 de enero del 2010, que devastó a Puerto Príncipe, miles de haitianos han cruzado la frontera para establecerse ilegalmente, muchos pagando un peaje a los militares de puesto en la frontera, según lo denunciado por la institución jesuita Solidaridad Fronteriza.Camino advirtió que el problema es complejo, pero siempre habrá que buscarle una solución apegada a los principios enarbolados en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, de la cual nuestro país es signatario.“La función del Estado jamás puede ser suplantada por ningún grupo que, amparado en un falso nacionalismo, nos lleve a situaciones peligrosas que puedan servir de base para que organismos internacionales nos sancionen por estos hechos de persecución y maltrato contra inmigrantes”, apuntó. Señaló que esta supuesta limpieza se presta a extorsiones y abusos incalificables, por lo que “las autoridades de Migración tienen la obligación inmediata de frenar esta locura”. Sostuvo que es al Estado a quien toca definir y aplicar una política migratoria, que no debe valer solo para haitianos, sino para los demás extranjeros ilegales.
Llama a usar energías a favor de vida
La Iglesia llamó a las juntas de vecinos del sur de Santiago a emplear sus energías en favor de la vida. Sostuvo que su trabajo debe estar orientado a fomentar la cultura del diálogo en los diferentes sectores, prevenir la violencia intrafamiliar, llevar a cabo jornadas ecológicas, campañas de limpieza y otras tareas positivas.