La corte de farsantes
Por Edelvis García Herrera
Los beneficiarios del actual estado de cosa en que vive nuestro país siembran la desesperanza en el pueblo vendiendo la idea de que no es posible cambiar el rumbo que ellos mismos le han impuesto para vivir como verdadero monarcas, disfrutando de las mieles del poder, llenos de privilegios, protegidos, rodeados de una parafernalias de farsantes, tumba polvos y vividores, asaltantes…
Esos monarcas modernos se enriquecen en un abrir y cerrar de ojos y no les interesa resolver los problemas fundamentales de la nación porque crean diversas formas de clientela, manipulación de las masas, asistencialismo a través de ambulancias, para supuestamente resolver los problemas que ellos crean y verse como mesías o salvadores.
¿Es posible que haya-en pleno siglo XXI- hospitales sin ambulancia, barrios sin clubes, sin bibliotecas, sin escuelas; sin electricidad, o sin agua potable; pero dónde opera a la vista de todos los puntos de drogas bajo la complicidad de funcionarios civiles y militares? Simplemente, hemos dicho, son beneficiarios y por eso defienden con saña el modelo económico y político prevaleciente en el país.
Centenares de miles de dominicanos coincidimos en que se hace necesario producir un cambio de modelo; ahora bien, esto no ocurrirá porque lo decretemos desde una posición pasiva y sólo idealista. Hay que producir una gran convergencia de diversos sectores sociales, políticos y de ciudadanos que desplacen para siempre del poder a los asaltantes que han dirigido el Estado dominicano, y que han sumido a la nación en la pobreza extrema.
¿Pero por qué decimos que hay que cambiar el modelo económico y político? Porque en lo económico sólo se promueve las importaciones y el consumo, y cada día son miles de productores nacionales que se van a la quiebra, lo que trae marginalidad, exclusión y pobreza; lo decimos porque es un modelo que privatiza todo el patrimonio nacional y exonera de responsabilidad al Estado en sus funciones; que promueve el clientelismo, el tráfico de influencia y el uso de manera indiscriminada y descarada de los recursos del Estado; donde priman los privilegios y la impunidad; porque no se respetan las instituciones y manipulan al pueblo; por la inequidad social y el abandono absoluto de los desposeídos; y que a pesar del crecimiento macroeconómico sólo se beneficia un minúsculo sector enquistado en el poder .
El cambio es posible y debe ser ahora. No podemos escudarnos en la sombrilla de la flojedad y la holgazanería, o en la falta de dinero; si nos apoyamos en la gente, y no hacemos alianzas con los partidos tradicionales, la República Dominicana tendrá un gobierno progresista, duartiano, justo, soberano, productivo, seguro, envidiable.
Ejemplos de triunfo y sin dineros hay decenas; sólo es un asunto de trabajo y metas concretas. Guillermo Moreno es una la mejor opción. Llama al 809-525 8348, ó al 829-679-4210 si quieres información de Alianza País. También en el correo keiter@hotmail.com
Los beneficiarios del actual estado de cosa en que vive nuestro país siembran la desesperanza en el pueblo vendiendo la idea de que no es posible cambiar el rumbo que ellos mismos le han impuesto para vivir como verdadero monarcas, disfrutando de las mieles del poder, llenos de privilegios, protegidos, rodeados de una parafernalias de farsantes, tumba polvos y vividores, asaltantes…
Esos monarcas modernos se enriquecen en un abrir y cerrar de ojos y no les interesa resolver los problemas fundamentales de la nación porque crean diversas formas de clientela, manipulación de las masas, asistencialismo a través de ambulancias, para supuestamente resolver los problemas que ellos crean y verse como mesías o salvadores.
¿Es posible que haya-en pleno siglo XXI- hospitales sin ambulancia, barrios sin clubes, sin bibliotecas, sin escuelas; sin electricidad, o sin agua potable; pero dónde opera a la vista de todos los puntos de drogas bajo la complicidad de funcionarios civiles y militares? Simplemente, hemos dicho, son beneficiarios y por eso defienden con saña el modelo económico y político prevaleciente en el país.
Centenares de miles de dominicanos coincidimos en que se hace necesario producir un cambio de modelo; ahora bien, esto no ocurrirá porque lo decretemos desde una posición pasiva y sólo idealista. Hay que producir una gran convergencia de diversos sectores sociales, políticos y de ciudadanos que desplacen para siempre del poder a los asaltantes que han dirigido el Estado dominicano, y que han sumido a la nación en la pobreza extrema.
¿Pero por qué decimos que hay que cambiar el modelo económico y político? Porque en lo económico sólo se promueve las importaciones y el consumo, y cada día son miles de productores nacionales que se van a la quiebra, lo que trae marginalidad, exclusión y pobreza; lo decimos porque es un modelo que privatiza todo el patrimonio nacional y exonera de responsabilidad al Estado en sus funciones; que promueve el clientelismo, el tráfico de influencia y el uso de manera indiscriminada y descarada de los recursos del Estado; donde priman los privilegios y la impunidad; porque no se respetan las instituciones y manipulan al pueblo; por la inequidad social y el abandono absoluto de los desposeídos; y que a pesar del crecimiento macroeconómico sólo se beneficia un minúsculo sector enquistado en el poder .
El cambio es posible y debe ser ahora. No podemos escudarnos en la sombrilla de la flojedad y la holgazanería, o en la falta de dinero; si nos apoyamos en la gente, y no hacemos alianzas con los partidos tradicionales, la República Dominicana tendrá un gobierno progresista, duartiano, justo, soberano, productivo, seguro, envidiable.
Ejemplos de triunfo y sin dineros hay decenas; sólo es un asunto de trabajo y metas concretas. Guillermo Moreno es una la mejor opción. Llama al 809-525 8348, ó al 829-679-4210 si quieres información de Alianza País. También en el correo keiter@hotmail.com
0 comentarios:
Publicar un comentario