WASHINGTON. Los niveles de azúcar en la sangre hacen que, en un matrimonio, cada integrante sienta más ira hacia el otro, y también aumentan el de agresividad, según un publicado este lunes en .
El demuestra como el simple hecho de tener , resultado de niveles de glucosa, puede ser un factor de tensión en las , provocando discusiones e incluso violencia, explicó Brad Bushman, psicólogo de la de Ohio (norte) y principal autor del publicado en las Actas de de Ciencias de (PNAS) del 14 al 18 de abril.
La investigación fue realizada entre 107 casadas durante 21 días.
medir la ira, los investigadores dieron a cada participante un muñeco
vudú -que se supone representaba al cónyuge- y 51 alfileres.
Al del día, cada uno de los cónyuges clavaba un cierto de alfileres en su muñeco, según el de cólera que sintiera hacia su . Al mismo , cada cónyuge debe medir su nivel de glucosa en la sangre antes del desayuno y antes de ir a la .
Los mostraron que, cuanto era el nivel de azúcar, era la cantidad de alfileres clavados en el muñeco.
El vínculo entre glicemia y cólera persistió incluso entre las que se declaraban satisfechas de su unión.
Al de los 21 días, se les pidió a las que se sometieran a una prueba: presionar un tan fuerte como les fuera posible cuando un apareciera en la de un .
El ganador de cada tuvo la oportunidad de someter entonces a su cónyuge a un ruido fuerte, y decidir la intensidad y duración.
Los mostraron que quienes tenían un de glucosa más , se inclinaban por más y duraderos.
Un tercer reveló que aquellos que clavaron más agujas son quienes sometieron a sus a los peores ruidos.
Este fenómeno se explica por el hecho de que la glucosa es el principal del cerebro y el autocontrol necesario manejar la ira y los impulsos agresivos requiere mucha energía, según los autores.
“El cerebro representa el 2% de nuestro , pero consume el 20% de las calorías”, sostuvo Bushman, recomendando a las que, antes de una discusión difícil, estén seguros de que no tienen .
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