Panky Corcino
SANTO DOMINGO (Rep. Dominicana).-El ingeniero Carlos Ozoria,
acusado por la Procuraduría General de sustraer fondos públicos y de lavado de
activos, se hizo de una gran fortuna sirviendo –según se desprende del
expediente– a su “amigo e íntimo colaborador” Félix Bautista, desde que el
actual senador por San Juan de la Maguana dirigía la Oficina de Ingenieros y
Supervisores de Obras del Estados (OISOE).
Los bienes que el expediente describe como parte de la fortuna de Carlos
Manuel Ozoria Martínez incluyen un jet privado; la red de emisoras Radio Cadena
Hispanoamericana, que tuvo un costo de US$8 millones (más de RD$352 millones) y
Hormigones del Caribe, valorada por las autoridades en US$33.2 millones (más de
RD$1,400 millones).
El tamaño del emporio descrito por la Procuraduría arroja luz sobre la
esplendidez del ingeniero con los habitantes de Bonao, a quienes regaló en
diciembre de 2012 una fiesta popular navideña amenizada por los famosos
merengueros Johnny Ventura (El Caballo) y Fernando Villalona (El Mayimbe). Los
medios digitales que elogian su generosidad reseñaron que el empresario
“quedó muy satisfecho de haber cumplido con ese gran regalo que le hizo
a su pueblo”.
Durante la gestión de Hipólito Mejía (2000-2004) Ozoria se
benefició con la concesión de algunas obras, incluyendo la reconstrucción de la
carretera Casabito, que comunica Constanza con la autopista Duarte, y que nunca
se concluyó.
La reparación de la vía se incluía en un proyecto que llevó al entonces
secretario de Obras Públicas Miguel Vargas Maldonado a firmar
un contrato con el empresario árabe Mustafá Abu Naba´a y su
empresa Worlwide Trading & Company (WTC) para gestionar cartas de crédito
por US$155 millones.
La información salió a relucir en 2008, cuando el Ministro de Economía,
Planificación y Desarrollo (MEPyD), denunció que Vargas Maldonado aprobó
el financiamiento sin someterlo al Congreso Nacional, con el mismo
procedimiento que siguió Bautista desde la OISOE con el préstamo de US$130
millones contratado con la Sun Land.
Ozoria & Asociados y la Constructora
Moll, de Guarionex Molina, recibieron de la gestión de Mejía RD$161,269,166.65
de los RD$384,853,536.76 que tenía presupuestado el Gobierno para la reparación
de Casabito con fondos gestionado por la WTC (Semanario Clave/16/3/2006).
En 2008 el nombre de Carlos Ozoria se empezó a mencionar con frecuencia en
los medios informativos. Para entonces, diversas organizaciones ecológicas y
campesinas de Bonao acusaban a su empresa de extraer agregados de forma
indiscriminada de la cuenca del río Yuna.
Franklin Mena, ejecutivo de Ozoria & Asociados, aseguró
entonces que la compañía había construido, en noviembre de 2007 y como
contratista de Obras Públicas, un muro de gaviones, a un costo de RD$11.5
millones. La obra busca proteger del Yuna al sector Los Platanitos.
Cuando el presidente de Alianza País, Guillermo Moreno García, se querelló contra el expresidente Fernández por alegada corrupción y lavado de activos a través de su Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode), pidió a los tribunales que interrogaran al ingeniero Ozoria. La imputación no prosperó en los tribunales.
La imagen del constructor, creció con el mismo ritmo de la del político que
aspiró a ocupar un lugar en el Comité Central del PLD. Un blog de Bonao publicó
en mayo de 2009 que Ozoria y Bautista habían sido “de los armadores” del
acuerdo “de la corbatas azules” firmado entre Leonel Fernández
y Miguel Vargas Maldonado para reformar la Constitución y que ambos líderes se
habrían reunido en el apartamento del ingeniero oriundo de la provincia Monseñor
Nouel.
Una versión que podría ser mentira, pero que contribuye a alimentar un mito
de poder entorno al ingeniero Ozoria.
En jet privado y en la radio
La Procuraduría General describe a un Ozoria poderoso, que acumuló una
fortuna gracias a su íntima relación con Félix Bautista. El
expediente resalta que el ingeniero oriundo de Bonao declaró que compró a la
compañía estadounidense Secure Aircorp Inc. el avión matrícula N-6YY, marca
Gulfsteam, modelo G-1159, serie No. 253.
El avión, guardado en hangares de la empresa Caribair del Aeropuerto
Internacional La Isabela, fue traído al país 8 de septiembre de 2011 y, desde
entonces opera desde el país.
De acuerdo a la acusación de la Procuraduría, Ozoria “carecía de
actividad lícita productiva que pudiese justificar la adquisición de tan lujoso
bien”. Cita que la Dirección General de Impuestos Internos (DGII)
certificó que durante 2006 sólo retuvo al profesional de la ingeniería impuestos
sobre la renta a la persona física por un monto de RD$50,000; en 2007,
RD$172,629.91; en 2008, RD$37,186.15; en 2009, RD$17,897.38, y en 2010,
RD$26,054.08.
El documento señala que en 2012 Ozoria tuvo un ingreso salarial de RD$560,000
y que, además, registró deudas pendientes. El político peledeísta habría ayudado
a su amigo íntimo a comprar, a través de Comunicaciones Colorín, S.R.L. una
amplia red de emisoras que poseía José Francisco (Dorín) Cabrera
Maldonado.
La documentación apunta a que Ozoria y Leonte Rivera Sánchez constituyeron la
compañía Colorín el 16 de noviembre de 2006, con un capital suscrito y pagado de
RD$5 millones.
Los estatutos habían sido redactados diez días antes por Leonte Rivera
Sánchez, así como por Colorín, S.A.; Serigraf, S.A., e Inversiones Rivera
Sánchez, S.A., las tres representadas por el mismo Leonte Rivera Sánchez.
También, por Leonte Enmanuel Rivera Mejía, Giselle Marlene Mejía de Farisello y
Leonte Michel Rivera Mejía.
El 24 de julio de 2010 todos los socios vendieron sus acciones a Tenco Rofi,
S.R.L, representada por José Elías Hernández García, quien
quedó con un total de 44,990, un 89.98% de la compañía. Leonte Rivera Sánchez
retuvo 5,000 y Leonte Rivera Mejía transfirió 10,000 al empresario santiagués y
contratista Mícalo Bermúdez, propietario de Constructora Mar,
una de las empresas beneficiadas con adjudicaciones de obras de la OISOE.
Sin embargo, el 6 de abril de 2011 Tecno Rofi y Mícalo Bermúdez vendieron
todas sus acciones al ingeniero Ozoria.
Bermúndez había sido designado
gerente de Comunicaciones Colorín por un período de seis años, el 20 de agosto
de 2010, pero el 11 de abril del año siguiente pasó a ser sustituido por
Ozoria.
La Procuraduría determinó que Comunicaciones Colorín pagó a Dorín Cabrera
cuatro cuotas de un millón de dólares cada una: a la firma del contrato, a los
siete días, a los seis meses después y cuando el Instituto Dominicano de la
Telecomunicaciones (Indotel) aprobara la operación. Los otros cuatro millones
restante serían saldados en inmuebles.
Comunicaciones Colorín, encabezada por el ingeniero Ozoria, transfirió a
Inmobiliaria Juvelines S.R.L, de Dorín Cabrera, cuatro
apartamentos que, según la acusación, estaban en manos de empresas o familiares
del actual senador Bautista.
Uno de estos apartamentos es el B-10, del condominio Torre Hildred María, del
Consorcio Hemisferio Imperial, S.R.L., la cual tiene su domicilio social en la
calle Ortega y Gasset número 32, del Ensanche Naco, en el Distrito Nacional, la
misma dirección que Constructora Hadom, S.R.L, perteneciente a Félix
Bautista.
La Procuraduría recuerda que el nombre “Hemisferio Imperial” fue aprobado en
2010 por espacio de diez años para Gina Mireya Quezada Bautista, sobrina del
senador por San Juan de la Maguana. También resalta que la empresa estuvo
representada en la transacción por Bienvenido Apolinar Bretón
Medina, “persona íntimamente vinculada” al legislador.
Comunicaciones Colorín también transfirió a Carla Xiomara Cabrera Lockward y
José Antonio Cabrera Lockward, hijos de Dorín Cabrera, el apartamento 2, de la
Torre Continente, a través e Constructora Imperial, también registrada a nombre
de Quezada Bautista y representada por Bretón Medina.
El Ministerio Público determinó que la forma en que se hacía la transacción
demostraba que el senador compraba bienes millonarios a través de relacionados
que tenían conocimiento de que el político los adquiría con “fondos ilícitos que
había en perjuicio del Estado dominicano”.
La compañía representada por Ozoria también entregó a LR Holdings, una
compañía representada por José Francisco Cabrera Maldonado, hijo de Dorín
Cabrera, el apartamento 3 de la Torre Continente. La transacción la hizo también
Bretón Medina a nombre de la razón social Constructora Imperial.
Además, traspasó también el apartamento 10 del mismo condominio a
Inmobiliaria Juveniles, y el número B-2 de Torre Hidred María a Inmobiliaria
Terrazas Mulchen, S.R.L., de Dorín Cabrera. En este caso la compañía utilizada
por Comunicaciones Colorín fue Constructora Infepre, S.A., representada por
Gricel Araceli Soler Pimentel, cuñada de Félix Bautista y hermana de su exesposa
Guillermina Soler Pimentel.
Ozoria en hormigón
La acusación de la Procuraduría apunta a que el ingeniero Ozoria también
ayudó a su amigo íntimo a adquirir Hormigones del Caribe, una empresa que tuvo
un costo superior a los US$33 millones.
En ese sentido, explica que la compañía Ozoria & Asociados firmó, el 7 de
agosto de 2009, un memorándum de entendimiento con Sinercon, S.A., representada
por Juan Carlos Martínez, como propietarios de Hormigones del Caribe. El 21 de
diciembre de ese año las partes acordaron un pago de US$31.0 millones, más una
suma adicional que se fijaría más adelante.
Ozoria & Asociados pagaría en distintas modalidades, incluyendo US$6
millones en transferencia de bonos de deuda pública del Estado dominicano. El 5
de febrero de 2010 las partes volvieron a firmar un acuerdo tripartito en el que
el ingeniero Ozoria incluyó y representó a una nueva compañía denominada
Hormigones del Caribe S.R.L.
El objeto, según el Ministerio Público, era que “Homigones del Caribe S.R.L.
asumiera todo el control de la empresa” que opera una planta de producción,
negociación y transportación de hormigón desde el sector Manoguayabo, en la
capital y en las proximidades de la avenida Las Américas.
El 7 de diciembre de 2010 Ozoria & Asociados compra a Sinercon
maquinarias y equipos por un monto de US$2.1 millones. La Procuraduría determinó
que las citadas negociaciones se hicieron con dinero obtenido por Bautista y sus
relacionados en forma ilícita en el perjuicio del Estado dominicano por más de
US$33 millones.
El expediente vincula a Bautista, a través de Ozoria, con la construcción del
Centro Universitario Regional Cibao Central (CURCE-UASD), contratado por la
OISOE el 13 de diciembre de 2004 por un monto de RD$197,113,253.24, con Diseños
y Construcciones de Obras Civiles (Dicocisa), representada por Alberto
Alcibíades Holguín Cruz.
La Procuraduría explica que el Consejo de Desarrollo de la Provincia Monseñor
Nouel decidió, el 22 de octubre de 2007, entregar RD$140 millones a Dicocisa
para continuar con la citada obra. Argumenta que el 24 de abril de 2013 el
ingeniero Ozoria, “amigo íntimo colaborador” de Félix Bautista,
“reconoció que desde la suscripción del contrato él había sido el único y
absoluto responsable de las obras”. Fuente 7 Días.com
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