Cuando escuchamos hablar de bullying generalmente llega a
nuestras mentes la imagen de un estudiante de baja autoestima acosado y
molestado por sus compañeros de clase, sin imaginarnos que abarca otras áreas
en la etapa de adulto.
El bullying se define como la práctica de actos violentos o
intimidatorios constantes sobre una persona. Puede ser realizado por una o
varias personas, con el propósito de agredir, de hacer sentir insegura a la víctima,
o para entorpecer su desenvolvimiento y aunque se propagación ha sido enfocada
en las escuelas, también ocurre en las empresas.
Niurfy Ulerio, experta en bullying empresarial, manifiesta
que las situaciones molestas pueden generarse cuando alguien comienza a
trabajar en una empresa y comienzan a llamarle “el nuevo”. Afirma que se dan
casos en que los compañeros esperan que ese “nuevo” se comporte de un
determinado modo, sin considerar que cada persona es única.
Entrevistada en el programa Mujer Moderna Radio, Ulerio
precisó que a nivel empresarial las personas tienen formación, cultura distinta
y educación diferente a los demás porque cada familia impregna su personalidad
en la gestión educativa, aunque las empresas pueden esperar que el nuevo se
comporte, o sea, o reaccione de una manera con la que tal vez no pueda lidiar.
“Supón que entras nueva a una compañía y comienzan a
llamarte el nuevo, el nuevo, y empiezan a ejercer presión psicológica trayendo
situaciones por las que pueda sentirse acosada y decide renunciar por la
desmotivación de que ha sido objeto de burlas”, explicó.
¿Por qué se puede ser objeto de burlas?
Niurfy Ulerio, que además es ingeniera industrial y tiene
una maestría en administración de empresas, con experiencia en gestión laboral,
sostiene que los empleados pueden ser objeto de burla por su aspecto físico. “Si
es muy gordo, muy flaco, chato, si es muy bajito y hasta por el tipo de
cabello, sobre todo si es rizado, la manera en que te vistas, tu formación y
educación, hasta por la universidad en la que estudiaste puedes ser víctima de
bullying empresarial”.
Los más propensos a ser objeto de bullying empresarial son
las mujeres porque sufren acoso tanto de los hombres como de propio género en
el lugar de trabajo.
Asegura que el bullying empresarial no es nuevo porque
siempre ha habido los bulls o los que acosan y la persona que recibe el acoso,
pero el término se ha masificado y la gente empieza a identificarlo en esa área.
Ulerio defiende la postura de que la dignidad humana no se
transgrede teniendo como base el pilar de la igualdad humana sin importar raza,
sexo o condición económica: “Todo lo contrario, debe haber un rechazo tajante a
permitir el acoso de cualquier tipo”.
Empoderamiento
Afirma que se ha incrementado el número de personas que se
acerca al Ministerio del Trabajo a presentar su dimisión, y considera esto como
un avance significativo, porque si el empleado víctima presenta evidencia que
es objeto de maltratos en su ambiente de trabajo, el organismo obliga al
empleador a pagar las prestaciones laborales.
“Antes la gente solo decía no aguanto esto y renunciaba, ahora hay más empoderamiento y la
gente tiene más control de que está bien y que no se puede permitir”, destacó.
Ulerio opina que ese empoderamiento tiene base en las nuevas
generaciones, con más seguridad en sí mismos, por lo que se niegan a recibir
maltratos de cualquier parte.
Consejos
“Es importante que la gente tenga autoconsciencia, que se
conozca, que sepa qué le molesta y qué no; tener claro quién es como persona y
como profesional qué busca en la empresa para la que trabaja. Simplemente con
eso sabrá cuáles son los límites de la gestión y hasta donde aguanta”, sugiere.
Invita a no temer salir de un trabajo porque si se tienen
las condiciones y las competencias se puede obtener otro en donde se reciba un
trato digno.
Niurfy Ulerio actualmente es directora de reclutamiento de
una firma internacional Grupo Eulen, una empresa que se dedica a la
empleabilidad, imagen y marca personal, así como asesoría integral en gestión
de recursos humanos. Fuente Z101
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