NUEVA
YORK.- Una policía de Nueva York fue asesinada hoy a sangre fría por un sujeto
con pasado criminal que disparó a la cabeza de la agente cuando completaba su
turno de servicio.
"Está
claro que fue un ataque no provocado contra oficiales de policía que tenían la
misión de mantener la seguridad de la gente", afirmó el jefe de la Policía
de Nueva York, James O'Neill, en declaraciones a los periodistas poco después
del ataque.
De
acuerdo con la reconstrucción oficial de los hechos, Miosotis Familia, de 48
años de edad y 12 de servicio policial, estaba haciendo una serie de
anotaciones en un registro al haber completado su turno hacia las 0.30 hora
local (4.30 GMT) en el distrito de El Bronx.
Un
sujeto, que posteriormente fue identificado por medios locales como Alexander o
John Bonds, de 34 años, se acercó a la ventana del copiloto del vehículo, un
camión de comando policial, e hizo un único disparo con un revólver calibre
.38.
La
bala atravesó el vidrio y dio en la cabeza de la agente policial, que
rápidamente fue trasladada en grave estado a un hospital, donde pereció después
a causa de la herida, según confirmó el Departamento de Policía de Nueva York
(NYPD).
Familia,
de 48 años y madre de tres hijos, había sido enfermera antes de sumarse
posteriormente al NYPD.
Según
O'Neill, el atacante fue perseguido por otros agentes y a una cuadra del lugar
de los hechos murió por disparos de los policías cuando el sujeto sacó su
revólver.
El
alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, presente en la rueda de prensa que
ofreció O'Neill, recordó que el ataque se produjo dos horas después de que la
ciudad fuera testigo de los fuegos artificiales con motivo del Día de la
Independencia, una fiesta que, como es costumbre, requirió un despliegue
especial de fuerzas de seguridad.
"El
NYPD hizo un trabajo extraordinario manteniendo a esta ciudad segura, y justo
cuando había terminado quedó conmocionada por esta tragedia", afirmó De
Blasio.
El
atacante tenía un pasado criminal porque en 2006 fue sentenciado a siete años
de prisión por un robo en la ciudad de Siracusa, en el norte del estado de
Nueva York. Estaba en libertad condicional desde mayo de 2013.
También
había sido detenido por golpear a agentes policiales, de acuerdo a informes de
medios locales.
Durante
el enfrentamiento con el atacante, según O'Neill, otra persona que se
encontraba allí resultó herida de bala y su condición es estable, aunque la
Policía no dio detalles sobre esta víctima.
El
asesinato a sangre fría de hoy recuerda el perpetrado en el distrito
neoyorquino de Brooklyn el 20 de diciembre de 2014, cuando fueron asesinados
los agentes Wenjian Liu y Rafael Ramos.
También
en esa ocasión, un sujeto, Ismaaiyl Brinsley, se acercó al vehículo en el que
se encontraban los dos policías y disparó a sangre fría contra ellos.
El
atacante se suicidó con un disparo de su arma cuando era perseguido por la
Policía.
0 comentarios:
Publicar un comentario