Un delito que queda impune por falta de justicia
Por Ruddy Dotel
Por Ruddy Dotel
En
la ciudad de Bonao se viene presentando un fenómeno muy especial y raro, pues
jóvenes que viven en el negocio del micro-tráfico y en el uso de sustancias
prohibidas, mueren a tiros, quizás por el control de territorio, o el no
cumplimiento de su trabajo en el mundo de la droga.
La
cantidad de persona que mueren en esta población es alarmante, la estadística
anual aveces alcanza hasta más de una decena de muchachos que pueden la vida a
manos del crimen organizado, que
presuntamente actúa en la sombra del poder y la complicidad de un reducido
grupo de militares y policías corruptos, favorecido por el dinero de este sucio
negocio.
Podemos asegurar que en la gran mayoría de
estos hechos de sangre en esta provincia, quedan sin investigar y peor aún
estos muertos no tienen dolientes en la justicia de Monseñor Nouel, no importa
que su familia reclame que quiere justicia.
La
delincuencia actúa de su cuenta, impone sus leyes en barrios y sectores de
Bonao, tanto así que los niveles de inseguridad se encuentran actualmente muy
alto en comparación con épocas anteriores.
Para corregir este mal social debemos trabajar
primero en la familia, luego ir detrás de aquellas personas con conductas de
mal vivencia, es decir no tener forma honesta de vivir, la mendicidad, el
alcoholismo, el consumo y tráfico de droga, delincuencia y otros males sociales
que tienen a la sociedad en un estado de inseguridad, zozobra e intranquilidad.
0 comentarios:
Publicar un comentario