Una mirada analítica a la obra poética de César Bolívar Encarnación Antuna

Escrito por: Gedalias Rosario, MA

Escribir no es tarea fácil. Escribir poesía va más allá de ese grupo de palabras que quiere decir algo. Es entonces la poesía “el lenguaje que dice más con mayor intensidad que el lenguaje ordinario”.

El lenguaje poético es, pues, intenso, poderoso, que transmite emociones, pero buscando y expresando significados que no son dichos de manera directa. Utiliza el escritor una serie de recursos y combinaciones en una simbiosis de la lengua creadora, en este caso, la poesía.
En Tulpo y otros poemas, la obra poética que es objeto de este análisis, nos encontramos con dos aspectos claves del significado lingüístico: la denotación y la connotación. Por ejemplo, en ese lenguaje denotativo que caracteriza esta obra ubicamos significados literales en versos del poema:

“Quiero un país de hombres
de lucha,
de trabajo,
progreso,
unidos para alcanzar la superación”

O en este clamor existencial que expresa en el poema “Angustia”:
“Oh, qué angustia
hace temblar mi conciencia!”

O mejor aún, cuando en el poema “Prisionero de tus cadenas” con bastante sencillez nos traslada a imágenes cotidianas como en los versos siguientes:

“Recuerdo aquel día.
Aquella joven mañana de Navidad.
Entre rojas manzanas, uvas, licores, sonrisa y alegría,
estrecharon mis manos tus manos”

Alude a imágenes sensoriales que nos ponen en contacto físico-literal de lo expresado.
No obstante utilizar la denotación como un recurso directo, respecto a lo que quiere significar sin ningún tipo de rebuscamiento intelectual profundo ni filosófico, también se visualiza como recurso la connotación (aspecto más importante en el lenguaje poético) ya que, a través de este, el lenguaje figurativo simboliza algo más que lo que la propia palabra pudiera expresar directamente y así surgen diversidad de ideas en imágenes como las observadas en estos versos:
“En la estancia de un día surto,
Yace en reposo la palabra.
Golpea la sombra; cae la tarde” (pág.70)
“La palabra plateada vaga como la espada cristalina.”
Resultan unos versos de hermosa comparación.

En los siguientes versos:
“Las lágrimas de un río cruzan diferentes paisajes” (pág.102), vuelve de nuevo lo denotativo con lo connotativo en una semi-metáfora sin mayores pretensiones poéticas.

O también cuando percibimos relación de color, dureza en penetrabilidad difusa, imperceptible acaso o fulminante por desapercibida, tal vez, sin dirección fija, nos pone a pensar y a divagar en múltiples ideas o cuando expresa: “De los cálculos de un cerebro arcaico, se escucha la voz.” Salimos de esa ensoñación simbólica y de bruces caemos en el mismo poema, a la realidad del lenguaje denotativo; “La muchedumbre de obreros se confunde en la inmensa polvoreda.” Aquí ya no hay lugar a interpretaciones, brillante combinación de imágenes y símbolos.

Sus poemas transcurren en una diversidad de situaciones muy humanas, perceptivas de la realidad vivida o percibida por el poeta y en su palabra la realidad y metáforas de la existencia humana.

Imágenes sensoriales, afectivas y emocionales caracterizan esta obra poética, comparaciones y contradicciones. Prosa poética en un momento, pura poesía en otros.

El autor no se inhibe y utiliza la lengua con antojo, desdén, como también consciente de mantener la esencia que lo distingue como hombre histórico, enamorado, de valores, familiares, con sentido social, con la interioridad de un ser que busca el sentido de su propia existencia a través de la poesía.

Poemas como “Barro” (pág. 57), “Campanario” (pág. 53), “Tulpo” (pág. 31) (este nombre inventado por el autor, no existe tal palabra en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española), “Ser Joven” (pág. 25), “Quiero un país” (pág. 23), “Amelia” (pág. 17), “Prisionero de Tus Cadenas” (pág. 93), “Madre” (pág.36), solo por mencionar algunos ejemplos de estas interesantes piezas poéticas.

Les invito a leer esta obra y adentrarse en los sentimientos del autor. Estamos ante una composición escrita de gran valor, que denota los niveles de creación y juego del lenguaje que caracterizan al autor.

Bienvenido Tulpo y otros poemas a la verdadera literatura creativa de la colmena literaria de nuestra provincia y de nuestro país.

Gedalias Rosario, MA
Escritora