Danilo Medina considera que para que haya un clima de paz hay que vencer las desigualdades sociales
El presidente Danilo Medina informó ayer aquí que en los próximos días anunciará al país un plan para reducir la delincuencia y la violencia en general que, según dijo, se logrará disminuyendo la desigualdad social y construyendo una sociedad más homogénea como está trabajando su gobierno.
Las declaraciones del mandatario son la reacción ante las preocupaciones externadas por el obispo de la diócesis La Altagracia sobre la violencia intrafamiliar, al pronunciar la homilía de la misa solemne con motivo del Día de Virgen de la Altagracia, a la que asistió el jefe del Estado, su esposa y algunos de sus funcionarios más cercanos.
Medina dijo que desde hace mucho tiempo tiene la tesis que trabajar en contra de la pobreza y disminuir la pobreza va a contribuir mucho a establecer un clima de paz y de cohesión social en el país.
“Por eso yo estoy trabajando en esa dirección, yo estoy convencido de que mejorando la desigualdad social, construyendo una sociedad más homogénea vamos a establecer un clima de paz porque eso va a ayudar a crear una sociedad con mucha cohesión social”.
Manifestó que su gobierno trabaja en muchos lugares del país para crear mejores condiciones de vida de la gente que vive en la marginalidad y darle un mejor sentido a su propia vida con metas específicas para crecer y desarrollarse que les permitan tener los ingresos para resolver los problemas sólidos de su familia.
“Porque también la gente está agobiada de problemas personales, de hogares que se fraccionan, niños que están creciendo sin referente masculino y todo tiene que ver mucho con esta desigualdad social en la República Dominicana y la región, nosotros somos la región con mayor desigualdad social del mundo y eso de alguna manera se expresa.
El mandatario, entrevistado luego de visitar el museo altagraciano en la misma sede de la Basílica, dijo que muchos jóvenes no tienen horizontes claros y muchos van a las universidades y deambulan por las calles porque no encuentran trabajo donde desarrollarse.
La voz del obispo
De su lado, monseñor Nicanor Peña llamó en su homilía a los hombres de buena voluntad a resaltar la figura de la mujer, a valorarlas, a apreciarlas y respetarla porque son las esposas, las hijas, las hermanas, madres, tías, primas y abuelas.
Dijo que la fe debe iluminar las distintas dimensiones de la vida del hombre y la mujer para que la fe tenga una dimensión social, política, económica, cultural y religiosa.
“Sabemos que los desafíos, los problemas y dificultades que hoy enfrentamos son muchos, cuyo impacto principal recae sobre todo en la familia, con la concebida consecuencia de convertirse en caldo de cultivo para alimentar la delincuencia que lleva a la sociedad a un verdadero desequilibrio”.
Agregó que este año de fe y de cara a tanta violencia intrafamiliar hay que exhortar desde lo más profundo de su ser a cada hombre y mujer a acoger en sus corazones la palabra de Dios.
Fuente El Caribe
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