Reitera legisladores debieron eliminar “barrilito”
La diputada Guadalupe Valdez defendió su propuesta de que se eliminen partidas del Presupuesto General del Estado para 2013 por un monto total de 654 millones de pesos porque esos fondos están destinados a acciones que corresponden a la administración pública, no a los legisladores.
La representante nacional por la Alianza por la Democracia (APD) expresó que la labor de los diputados y senadores se circunscribe a “legislar, fiscalizar y representar”, por lo que cuando se atribuye funciones administrativas pagadas con fondos públicos, como el “barrilito”, violan la Constitución que establece que esas son atribuciones de los ministerios y organismos descentralizados.
Entrevistada en el matutino “El Bulevar con Pablo McKinney”, Valdez señaló que según lo que ha declarado el presidente Danilo Medina el presupuesto de 2013 es de austeridad, pero eso no se consigue dando dinero a diputados y senadores para que hagan clientelismo político mediante ayudas a personas necesitadas, becas o entrega de ataúdes
Asimismo, Valdez deploró que el presupuesto de la Cámara de Diputados no fuera aprobado previamente por el pleno antes de ser enviado al Ministerio de Hacienda como establece el reglamento de ese cuerpo legislativo.
La diputada de la APD admitió que los senadores y diputados incurrieron en una violación de la Constitución al legislar para su propio provecho cuando se asignan fondos para ellos mismos administrarlos y no descartó que algún ciudadano recurra al Tribunal Constitucional para revocar la decisión de mantener el “barrilito”.
Aclaró que en su caso, aunque vive en un barrio donde también hay mucha gente necesitada, ella no hace clientelismo, sino discutir iniciativas legislativas con su comunidad y representar para buscar soluciones a los problemas ante otras instituciones.
“Los legisladores no se pueden elegir por la cantidad de dinero que den”, expresó Valdez, tras postular que hay que mejorar la calidad de la política. Manifestó que no puede ser a quien apueste más y compre más en el mercado electoral, sea la persona electa para ocupar una curul en el Congreso Nacional.
Cuando se le preguntó si al ir a contracorriente de la mayoría de los diputados que quieren manejar dinero público no lo consideraba un “suicidio político”, Valdez reconoció que modificar partidas en el presupuesto es un proceso que genera simpatías y resistencia.
“Estoy firmemente convencida de que hay que continuar con este tipo de acciones para que este país pueda cambiar”, respondió la legisladora y dirigente de la APD, al preguntársele si su petición, que los legisladores rechazaron de plano no se trataba de un suicidio político. “Estamos haciendo un aporte a la cultura política, no un suicidio político”, dijo.
Aclaró que finalmente votó por el presupuesto porque consigna el 4% del Producto Interno Bruto para la educación, por lo que ahora la labor ciudadana tiene que ser mantener la vigilancia para que esos fondos se entreguen y ejecuten para beneficio de una mejor calidad de la educación pública.
Los fondos
Los fondos de los que se habla son entregados a los congresistas para actividades asistenciales a los habitantes de sus respectivas demarcaciones, conocidos como “barrilito” y “cofrecito”.
Fuente El Caribe
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